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El PP gallego equipara los ataques de Hamás con 54.000 muertos palestinos y rechaza una moción de apoyo a Gaza

Palestinos desplazados internamente llegan desde el sur de Gaza a través de la carretera Al Rashid hasta la Ciudad de Gaza, en el norte de la Franja de Gaza, 28 de enero de 2025.

Daniel Salgado

18 de junio de 2025 18:11 h

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El PP gallego se resiste a tomar partido. Para la derecha, las imágenes que trascienden de lo que Israel está perpetrando en la Franja de Gaza son “sobrecogedoras e inaceptables”. Como “lo fueron igualmente”, aseguró en el Parlamento gallego su portavoz Alberto Pazos Couñago, “los atentados de Hamás el 7 de octubre de 2023”. En estos murieron 1.200 personas. La política genocida israelí ha acabado solo en Gaza con las vidas 54.000 palestinos, 18.200 de ellos niños y niñas, ha provocado 80.000 heridos y dejado al 85% de la población del lugar sin hogar. El PP ha rechazado una proposición no de ley defendida en comisión por el Partido Socialista que instaba a la Xunta de Galicia a apoyar la posición del Gobierno español en el conflicto, exigir un alto el fuego y el respeto al derecho internacional humanitario, o el respaldo al reconocimiento del Estado palestino.

Pazos Couñago basó la argumentación de su negativa en lo que denominó “consenso en política internacional” entre los dos grandes partidos estatales -PP y socialistas- desde la restauración de la democracia y que el Ejecutivo de Sánchez, sostuvo, ha roto. En su relato no hubo lugar para la implicación del gabinete de Aznar en la invasión de Irak sin aval de la ONU y sobre una justificación de mentiras. Tampoco para la abstención que Alianza Popular, organización antecesora del PP, pidió en el referéndum sobre la permanencia de España en la OTAN. Entonces el PSOE, tras un cambio radical de posición, solicitó el sí. Y a pesar de que la parlamentaria socialista que presentó la propuesta sobre Palestina en la Cámara gallega, Paloma Castro, se afanó en explicar que la solución de los dos Estados -palestino e israelí- es por la que históricamente ha abogado España, Pazos Couñago criticó “los bandazos y rupturas de acuerdos” de Sánchez.

“En este tema no se puede ser equidistante. La respuesta a unos atentados [que todas las fuerzas con representación en el Parlamento de Galicia condenan] no puede ser exterminar una población”, dijo Castro, que recordó que cada vez “más voces cualificadas” definen lo que está haciendo Israel en Gaza como genocidio. La diputada del BNG Iria Taibo coincidió con esta apreciación y aseguró que “no se trata de una guerra, sino de un genocidio planificado” en el que el Estado israelí ha convertido la Franja “en un campo de exterminio”. Y aunque dijo compartir parte de la proposición del PSOE, la enmendó para solicitar al Gobierno central la ruptura de relaciones diplomáticas y comerciales con el país agresor y que se implique más en trasladar a Benjamin Netanyahu, primer ministro israelí, al Tribunal Penal Internacional por “crímenes de guerra y de lesa humanidad”. Castro no aceptó la enmienda y los nacionalistas se abstuvieron en la votación de un documento que decayó por el rechazo del PP, con mayoría absoluta.

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