El Gobierno de Pradales negociará con la oposición los presupuestos de 2026 antes de su presentación en octubre

Antes que nunca, sin siquiera haber llegado a la mitad el año y del ejercicio presupuestario en curso, el Gobierno de Imanol Pradales ha presentado ya las “directrices” para los presupuestos de 2026, los segundos de la legislatura. Serán expansivos, a juicio del consejero de Hacienda, Noël d'Anjou, si bien no ha aportado aún cifras concretas aunque sí ha destacado el sólido crecimiento de la economía vasca a pesar del “volátil” contexto internacional. “Esperamos contar con un crecimiento moderado del presupuesto para fortalecer áreas clave sin comprometer la estabilidad financiera del Gobierno”, ha manifestado
PNV y PSE-EE, las dos patas del Gobierno, tienen mayoría absoluta para sacarlos adelante. Así ocurrió con los de 2025. Sin embargo, el pasado año se exploró una negociación. Este año también será así. De hecho, D'Anjou ha confirmado que dará más margen de tiempo a las conversaciones y que las iniciará incluso antes de la presentación formal de los números, que como cada año será a finales de octubre, después de que a mediados de ese mes el Consejo Vasco de Finanzas fije los datos de recaudación y los 'techos' de gasto.
D'Anjou ha aludido a unos presupuestos de 2026 que buscarán “bienestar” y “crecimiento” en un contexto marcado por incertidumbres globales. El titular de Hacienda ha destcado un “cuadro macroeconómico revisado al alza”, aunque en puridad las previsiones las marca el vicelehendakari y consejero de Economía, Trabajo y Empleo, Mikel Torres, de la parte socialista de la coalición de Gobierno. Ha mencionado una previsión de crecimiento del PIB del 1,8% en 2026 y de cierre del 2,1% en 2025 (revisado al alza hace escasas semanas). Se prevé un volumen de creación de 12.000 empleos el próximo año, con una tasa del 7% a finales de este año y que “incluso mejoraría” el siguiente.
De las partidas de los presupuestos aún no hay detalles. D'Anjou sí ha indicado que buscarán reforzar la igualdad de género o que la lucha contra la emergencia climática “ya no es una opción”. Ha citado la DANA de Valencia, que se produjo justo el mismo día en que él presentó los primeros presupuestos de la legislatura. También ha señalado que las cuentas deberán reflejar “avances” en el “fortalecimiento” del autogobierno vasco. En 2025 se debería completar el traspaso de las materias pendientes, incluida la gestión económica de la Seguridad Social.
Todavía no hace ni un mes que se aprobó la modificación de los presupuestos en vigor, los de 2025. Se flexibilizó el margen de deuda en 1.000 millones de euros para proyectos industriales. La oposición ha criticado de modo recurrente que no se ha concretado aún el destino de esos fondos adicionales. D'Anjou, preguntado por los periodistas, tampoco ha dado detalles más allá de que en breve habrá ya una primera presentación del plan de industria y que “a finales de verano” estará ya todo en marcha. El titular de Hacienda ha insistido en que el nivel de endeudamiento de la comunidad autónoma es mucho más bajo que la media y que hay margen para tirar de esos recursos extraordinarios.
En este sentido, el consejero de Hacienda se ha referido a una de las medidas de choque contra la subida de los aranceles con la que amenaza Estados Unidos. Se ha activado ya una línea de céditos de 450 millones “de apoyo al sector empresarial”. Se han firmado “convenios con Elkargi y las principales entidades financieras de Euskadi para facilitar que las pequeñas y medianas empresas, grandes empresas elegibles y personas empresarias individuales y profesionales autónomas, pertenecientes a sectores de actividad con mayor relación comercial con EEUU, puedan atender a las necesidades de liquidez”, se ha indicado. “Estos préstamos tendrán un plazo de amortización de cinco años con posibilidad de un máximo de dos años de carencia”, ha informado el Ejecutivo.
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