“No al chiringuito antiaborto de Vox y del PP”: la indignación feminista se dispara contra el Ayuntamiento de Sevilla

La Oficina de Atención a la Maternidad municipal de Sevilla empezó formalmente a funcionar el pasado 12 de mayo, y ya acumula dos protestas de colectivos feministas ante lo que consideran que es sin más un centro antiaborto. Si el mismo día que abrió ya hubo una concentración a sus puertas, este miércoles el escenario ha sido la propia sede del ayuntamiento, ante el que se ha exigido el cierre de este “chiringuito antiaborto de PP y Vox”.
Las alrededor de 40 entidades que han respaldado el manifiesto en contra de la oficina, Nuestros derechos no están en venta, tienen claro que se trata de una batalla ideológica: el nuevo centro es “una contraprestación” del PP “al vergonzoso pacto presupuestario” con Vox, que permitió al alcalde, José Luis Sanz (PP), sacar adelante las cuentas de este año. Un acuerdo, se subraya, con un razonamiento que se considera “plagado de argumentos machistas, xenófobos y retrógrados”.
A la batalla de las entidades feministas –con una escenografía inspirada en El cuento de la criada– se han unido este miércoles rubricando el manifiesto fuerzas políticas de izquierda (PSOE, IU o PCA), sindicatos (CCOO y UGT) y otras agrupaciones sociales. Han acudido a una convocatoria que se ha organizado “de forma unitaria, sin liderazgos”, en un intento de transmitir una imagen de unidad por parte del colectivo feminista en su integridad, tal y como apunta Vanessa Casado, secretaria de Mujer e Igualdad de CCOO de Sevilla.
Las manifestantes han formado una cadena frente a la fachada principal del consistorio, en la Plaza Nueva. Entre los carteles que han exhibido, han podido leerse mensajes como Nuestros derechos sexuales y reproductivos no están en venta, Nosotras parimos, nosotras decidimos o Aborto libre gratuito y en la sanidad pública.
Oficina gestionada por Vox
El nuevo centro municipal es una concesión en toda regla del PP a los postulados de Vox, que lo dirige directamente por medio de una conocida activista provida y antiaborto, María Pastor, que ha figurado varias veces en las listas electorales de la formación de ultraderecha. Pastor ya ha avanzado que su objetivo es “promover la cultura de la vida”, en contraposición a la “cultura de la muerte” imperante en Sevilla en los últimos años, en los que se ha “promovido el aborto”.
El gobierno local del PP, por su parte, defiende la “transparencia” de esta oficina, que el regidor hispalense ha llegado definir como “nada criticable, valiente, necesaria e igualitaria”. Su enfoque es que no es antiaborto ni “antinada”, resaltando que con ella se combate la baja natalidad y que “es una ventanilla más que tiene cualquier mujer embarazada para interesarse de las ayudas que puede recibir desde la administración”.
Las convocantes han confrontado el afán de Vox por desmantelar lo que define como “chiringuitos feministas” con el hecho de que han puesto en marcha un “chiringuito antiaborto”. Todo ello, con la guinda de un sueldo de 50.000 euros a su directora, “abiertamente machista, xenófoba y lgtbifóbica” en lo que implica “no sólo una clara ausencia del más mínimo decoro sino que representa un claro insulto a la inteligencia de cualquier persona”.
Contra el gobierno de José Luis Sanz
“No nos va a parar nadie con esta demanda”, añade la presidenta de la entidad feminista Colaboratorias, Anabel Caballero, para quien esta oficina es “una iniciativa puramente ideológica”. El propio nombre de Oficina de Atención a la Maternidad no deja de ser a su juicio un eufemismo, una forma de “enmascarar” una propuesta “con una grave incidencia para la libertad de las mujeres”.

“Esto es una forma de coaccionar a las mujeres más vulnerables”, incide Vanessa Casado, que recuerda que ya hay recursos municipales para “informar de forma objetiva y ofrecer contactos para las que necesiten ayudas económicas”. En contraste con ello, se ha abierto un espacio “para que la maternidad llegue a término sí o sí, se habla de convencer a la mujer embarazada, cuando los servicios públicos lo que tienen que hacer es acompañar”.
La creación de esta oficina, que evidencia el gobierno de hecho que en la práctica conforman PP y Vox, no es la única victoria que ha conseguido la formación de ultraderecha, ya que los populares también han eliminado planes de igualdad de los sindicatos y han apoyado que se subvencione a una asociación provida precisamente con los fondos que se le han quitado a UGT. Además, el PP se ha comprometido a crear también un cheque bebé para fomentar la natalidad.
El “declive” de las políticas de igualdad
El manifiesto suscrito por unos 40 colectivos carga las tintas contra Vox, pero no se olvida ni del PP ni del alcalde. “Las políticas de igualdad en Sevilla han ido en claro declive desde que el actual equipo de gobierno ganó las elecciones”. En este camino ha habido hitos negativos como el desmantelamiento de la Delegación de Igualdad, dejar morir los dispositivos de atención directa a las víctimas o la falta de iniciativas en políticas igualitarias.
“El alcalde de Sevilla no ve a la extrema derecha en su gobierno porque básicamente sus metas son las mismas, aunque su estrategia sea menos estrambótica”. “Este gobierno del PP, más allá de las fronteras de nuestra ciudad, es claramente antifeminista”, subraya el texto consensuado por las entidades feministas, en el que se reivindican los “derechos sexuales y reproductivos” de las mujeres, que “han sido siempre codiciados por el heteropatriarcado capitalista”.
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